Néstor Pitana será el encargado de impartir justicia en el primer Superclásico del año, en
Mar del Plata. Los Millonarios aún lo recuerdan con una sonrisa. Los Xeneizes, no tanto.
El 2014 fue un año inmejorable para River. Además de los títulos obtenidos, el equipo de Marcelo Gallardo disfrutó de una racha invicta en Superclásicos que ya es histórica: de ocho partidos disputados, Boca no pudo ganar ninguno. Sin dudas, el encuentro más recordado será el de la Copa Sudamericana, por su trascendencia internacional y porque se vivió como una revancha, pero ahí nomás aparece el recuerdo de la Bombonera.
Ramiro Funes Mori vivió su noche soñada, cuando con un cabezazo a pocos minutos del final le dio la victoria a la Banda en tierras enemigas luego de una década. Más allá de la figura excluyente del Mellizo, ese partido tuvo otro protagonista: Néstor Pitana. Luego de la derrota, el referí fue el blanco de la bronca de los jugadores e hinchas del equipo de la Ribera porque el gol del triunfo millonario vino luego de un tiro de esquina mal cobrado. Luego, claro está, nadie hizo nada para evitarlo.
Ahora, ambos equipos volverán a estar bajo la atenta mirada de Pitana en Mar del Plata. El misionero fue designado por la AFA para dirigir el Superclásico que se jugará el 24 de enero en la ciudad feliz, por la Copa Luis Nofal. Lo acompañarán los jueces de línea Hernán Maidana y Diego Romero, mientras que Pablo Díaz se desempeñará como cuarto árbitro. De un lado y del otro, el “No fue córner” es difícil de olvidar.
*La nota también fue publicada por la autora en Resumen Sports.
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