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miércoles, 13 de agosto de 2014

Mucha pimienta y un poco de Romero

Lanús ganó sin mucho brillo por la mínima ante Belgrano con gol de Silvio Romero que vuelve a vestir la camiseta "Granate" después de su préstamo en Francia.



El partido arrancó intensivo. Sobre todo el "Pirata", que cortaba en el medio a un Lanús que intentaba jugar el fútbol que acostumbra a mostrar y lo atacaba pero no llegaba a lastimar. Tan intenso arrancó el partido que a los 4 minutos, Silvio Romero en la primera que tocó, se le escapó a Barrios y definió al segundo palo poniendo el 1 a 0 para el local sin merecerlo.

El partido cambió a partir del gol, Lanús era el que dominaba la pelota y el que más llegaba. Con paciencia, distribuía y llegaba cuando lograban conectarse bien Acosta, Valdéz Chamorro y Romero.

Belgrano buscaba una contra en los pies de Zelarrayán y al "10" no le alcanzaba ya que nadie se le acercaba. El "Picante" de vez en cuando, pero no le era suficiente.


El conjunto cordobés, dirigido por Zielinski, se acomodó en el juego y lo tornó aburrido. Los dos llegaban poco y nada. Un poco más Belgrano pero con muchos tiros de afuera del área.

Toda la emoción llegó sobre el final del primer tiempo: Una gran tapada de Marchesín a un cabezaso de Pereyra cuando faltaban tres minutos para finalizar la primer mitad y otra del "Picante" que pegó en el palo dos minutos después fueron las chances para Belgrano y un zurdazo de Pasquini que despejó Olave cuando se habían cumplido los dos minutos de recupero fue la chance del local.


En el segundo tiempo, al minuto ya avisaba Belgrano. Rigoni se escapaba, tiraba el centro y Zelarrayán cabeceaba por encima del travesaño.

A los 4 minutos, Araujo parecía complicarse pero habilita de una manera exquisita a Romero que tira el centro a un caído Santiago Silva y Trucco cobró penal. El mismo uruguayo fue quien se hizo cargo. Le pegó bien, pero Olave se estiró, la tocó, pegó en el palo y corrió por toda la línea sin entrar. La última vez que Silva había ejecutado un penal, también lo había fallado.


El penal hizo que se calmen y se cuiden más ambos equipos. Se relajaron y casi ni atacaron. Lo más interesante del arranque del segundo tiempo, fue el hondureño Bengston que aguantaba el bochazo, abría e iba a buscar el centro que nunca iba a llegar.

Belgrano de a poco iba creciendo. Primero una llegada del hondureño y después con varios tiros de media distancia. Lanús se arrinconaba y esperaba. Pero cuando recuperaba y buscaba atacarlo, asustaba.


El final se hizo más metido y de ida y vuelta. Belgrano que buscaba desesperado el empate y Lanús que aguantaba el cero y deseaba tener una contra.

Ninguno de los dos lastimó y el equipo de los mellizos Barros Schelotto se quedó con el triunfo en el sur del Gran Buenos Aires ante un duro Belgrano.

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